PROYECTO 3P


En este proyecto se pretende cuestionar el rol y el género  a través de la exageración ridiculizada de ciertos tópicos sociales, basados en la doble moral, cargados de humor sarcástico.  La frase que hemos utilizado, principalmente, es: “La mujer debe de ser una señora en la calle y una puta en la cama”, un dicho muy generalizado en generaciones pasadas, muy cercanas a las madres y/o abuelas de cada uno. Así, consideramos, para este juego, el siguiente lema: “La intimidad perversa, en la sociedad perfecta, para la mujer productiva”.

Para ello, se realiza principalmente una serie de prótesis  con cierta apariencia lencera que modifica el cuerpo para que este tenga la posibilidad de que sea penetrado por lugares insospechados. Dichas prótesis serían tratadas como un producto perfectamente comerciable a través de una plataforma on-line; en el cual, se ofrecería su venta y todo lo que eso conlleva, como llevar a cabo una marca ficticia, 3P[1].



Hasta ahora, se han llevado a cabo un prototipo para el pecho de dichas prótesis y el resultado ha sido el buscado: con los mismos elementos utilizados en cualquier sujetador, se ha conseguido deformar dicha parte del cuerpo para conseguir un espacio perfectamente penetrable. Del mismo modo, la reacción con respecto al público es igualmente la deseada: la primera reacción es de asombro; la segunda, muy divertida, risas y con comentarios muy humorísticos; y, cuando ya te pones más serio, hay cierto rechazo o pudor, hasta que desde el punto de vista más íntimo y en el anonimato, muestran cierto deseo por conseguir el producto.


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[1] 3P: “La intimidad perversa, en la sociedad perfecta, para la mujer productiva”.